BIG ha revelado su concepto para el nuevo complejo deportivo del Washington Redskins, equipo de fútbol americano de la capital estadounidense. Completo con una cubierta semitransparte y ondulante, el proyecto busca redefinir la tipología del estadio de este tipo deportivo y en lugar de ser pensado para el día del partido, BIG prevé un uso más allá del deporte.
El estadio está diseñado para tailgating (una comida informal servida en la parte trasera de un vehículo estacionado fuera de un estadio o parque), tanto para la previa del juego como para el juego en sí mismo", dijo Bjarke Ingels al programa de televisión 60 Minutes. "Tailgating se convierte literalmente en un picnic en un parque. En realidad puedes hacer del estadio un destino más vivo a través del año, sin arruinar el césped para el partido".
"¿El típico estadio de la NFL (National Football League) tiene espacio para mejoras?", se preguntó retóricamente Ingels al The Washington Post. "Sí, ciertamente. Es una pérdida de recursos tener equipamientos gigantescos que están activos solo 10 meses al año... Hemos buscado destilar la experiencia del estadio -antes, durante y después del juego- a sus elementos esenciales para proporcionar la mejor intimidad para jugadores y fans, y al hacerlo, crear un estadio más compacto y eficiente en contraposición a los equipamientos colosales del pasado".
El dueño del equipo, Daniel Snyder, aún tiene que seleccionar el nuevo hogar del estadio. Los Washington Redskins actualmente juegan en el FedEx Field, un estadio de 80.000 asientos en el Estado de Maryland. Se dice que Snyder estaría considerando volver a jugar en Washington DC o reubicarse en Virginia.
